inverness
Castillo de Inverness y río Ness

Llegamos a Inverness, centro neurálgico, administrativo y capital de las Highlands, donde además desemboca el río Ness, cuyo camino nosotros veníamos siguiendo desde nuestra última parada, en el castillo de Uquhart.

Se trata de una pequeña ciudad medieval con un urbanismo atrayente y elegante que se despliega a ambos márgenes del río, desde el que se puede comtemplar el imponente castillo victoriano de Inverness.

Este castillo es actualmente la Corte de Justicia del condado, y cuenta asimismo con un museo y galería de arte a la que nosotros, sin embargo, no pudimos acceder. Si recorrimos el path (senda) a la ribera del río, cruzamos sus numerosos puentes, nos acercamos a la catedral de la ciudad y disfrutamos de una magnífica tarde en los parques y envidiables zonas verdes de la city.

Paseo y Catedral de Inverness

Las rutas turísticas sitúan Inverness como punto de partida para explorar las Highlands, dado su situación (en el centro de las tierras altas) y relativamente cerca de la reserva natural de los montes Cairngorms (en invierno una importante estación de esquí).

Como allí era a donde nos dirigíamos, no pudimos conocer toda la oferta de cultural que ofrecían esta ciudad y sus alrededores. como el desolado páramo de Culloden  (the National Trust for Scotland’s visitor centre at Culloden) que recuerda la historia de las luchas jacobitas lideradas por Bonnie Prince Charlie y que fracasó en la batalla del 16 de abril de 146; o los   «Clava Cairns«, restos de ancestrales e importantes enterramientos megalíticos.

No obstante, esta pequeña y discreta ciudad del  norte, bien merece una visita y, si se recorren las estrechas y céntricas calles se pueden encontrar sitios tan singulares y pintorescos como éstos:

Curiosos floreros en los jardines de Inverness

Spanish restaurant

Deja un comentario